Después del Templo de la Sagrada Familia es quizás el monumento más fotografiado de Barcelona.
Los que "tenemos la suerte" de vivir aquí, pasamos por su lado sin fijarnos demasiado en él. Es simplemente una rotonda con una escultura del descubridor situada sobre una columna rodeada de leones acostumbrados a que los turistas se suban encima para inmortalizar su paso por Barcelona.
No voy a dar una retahíla de datos sobre el monumento a Colón. Simplemente unas cuantas imágenes que nos abran el apetito y nos despierten la curiosidad para que la próxima vez que nos crucemos en el camino de Cristóbal Colón, crucemos la calle, entremos en la rotonda, subamos los cuatro escalones y en lugar de subirnos a los ocho leones que la flanquean, miremos hacia arriba para encontrarnos con Isabel de Castilla y Fernando de Aragón entre otros detalles.