8 de noviembre de 2010

New York, Tokio, Barcelona, Mediterraneo

Para conocer una ciudad en detalle, en este caso Barcelona, es recomendable dar de vez en cuando un paso atrás, para ver las cosas con perspectiva, para que los árboles no nos impidan ver el bosque. Alejar el punto de vista y observar las ciudades desde la distancia, con la mente y los ojos bien abiertos, como haría un turista (comparándolo todo con su ciudad de origen) es otra forma de conocer indirectamente Barcelona. Comparémosla entonces con dos de las ciudades más grandes del mundo, New York y Tokio.
Plano comparativo entre las ciudades de Nueva York, Tokio y Barcelona
A simple vista podemos comprobar que toda Barcelona cabría en uno de los mundialmente conocidos barrios de NY. La ciudad condal es sustancialmente más pequeña, y si comparamos las áreas metropolitanas vemos claramente que es una ciudad que está a otro nivel, en cuanto a tamaño se refiere.
Plano comparativo entre las áreas metropolitanas de Nueva York, Tokio y Barcelona

Barcelona está más en consonancia con ciudades vecinas, que han ido creciendo a orillas del mediterraneo, con un clima y una historia en común y con unas culturas que se han ido enriqueciendo mutuamente a lo largo de los siglos.

En cuanto a su densidad se refiere se encuentra en la 11ª posición europea después de Londres, Berlín, Madríd, Roma, París, Bucarest, Hamburgo, Budapest, Varsovia y Viena.


Si comparamos las áreas  Metropolitanas ascendemos al 6º puesto, detrás de París, Londres, Esse-Ruhr, Madrid y Milán.


El hecho de estar completamente urbanizada y tener limitado su crecimiento por el mar, la Sierra de Collserola y los rios Besós y Llobregat hace poco probable que pueda seguir creciendo en el futuro, a no ser que poblaciones del cinturón industrial como L'Hospitalet de Llobregat pasen a formar parte de los distritos de Barcelona, tal como ocurrió a principios de siglo con poblaciones como Gracia o Sants que fueron absorvidas después de derribar las murallas.


Bibliografía: 

29 de octubre de 2010

REDESCUBRIENDO EL MONUMENTO A COLÓN

Después del Templo de la Sagrada Familia es quizás el monumento más fotografiado de Barcelona. 
Los que "tenemos la suerte" de vivir aquí, pasamos por su lado sin fijarnos demasiado en él. Es simplemente una rotonda con una escultura del descubridor situada sobre una columna rodeada de leones acostumbrados a que los turistas se suban encima para inmortalizar su paso por Barcelona.


















No voy a dar una retahíla de datos sobre el monumento a Colón. Simplemente unas cuantas imágenes que nos abran el apetito y nos despierten la curiosidad para que la próxima vez que nos crucemos en el camino de Cristóbal Colón, crucemos la calle, entremos en la rotonda, subamos los cuatro escalones y en lugar de subirnos a los ocho leones que la flanquean, miremos hacia arriba para encontrarnos con Isabel de Castilla y Fernando de Aragón entre otros detalles. 





















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